Pueblos Fantasma

Pueblos abandonados en España

En España existen alrededor de 3.000 pueblos abandonados, pueblos sin ningún habitante y que años atrás rebosaban vida pero que ahora no son más que “pueblos fantasma”.

La causa principal de esta “desertización” es la emigración a las grandes ciudades. En los años 1950 comenzó el llamado éxodo rural. Muchas familias marchaban a la ciudad dejando atrás campos y casas deshabitadas para poder trabajar en la industria. Durante la guerra civil fueron, también, muchas las familias que emigraron.

Son muchas las iniciativas cuyo fin es su repoblación. Algunos aprovechan turísticamente estos pueblos para crear aldeas rurales, otros se mudan a eco aldeas, los hay que después de muchos años en la ciudad vuelven a sus orígenes…

Pero, y que hay de los, ya conocidos en el mundo entero, “spanish ghost towns”? En su día fueron proyectos urbanísticos que albergaban las ilusiones de mucha gente, construidos por la codicia y avaricia de ladrones con traje y corbata que se han quedado en eso, en proyectos.

Aunque hay otros muchos, estos son solo algunos de los pueblos fantasma que hay en España:

Lacasta (Zaragoza)

Otero de Sarriegos (Zamora)

Polituara (Huesca)

Seseña Nuevo (Toledo)

Solo me queda decir que... VIVA LOS PUEBLOS!

Alejandro Saporta  

@alexsaporta  

@cra_

facebook.com/casasruralesamigas

Els Ports, paraíso rural

Nos despertamos en Anroig, comarca del Maestrazgo, muy cerca de la costa Mediterránea. Probablemente en una de las aldeas más pequeñas de España. Pertenece al pueblo de Xert y tiene sólo 10 habitantes! Allí amanecemos rodeado de olivos centenarios e incluso milenarios. Quizás un pequeño paraíso, ideal para el turismo rural.  Llaman la atención en la Aldea tres casas de turismo rural cuyos techos y mobiliario están hechos con madera de olivo: RusticSuites, L´Aljub y Rustic Art.

Ascendiendo durante tan solo 20 minutos se llega a Morella. Pueblo medieval rodeado por 1.500 metros de muralla. Pero primero, a comer! En Morella se come fantásticamente bien. De primero una rica y caliente sopa morellana (a la derecha) hecha con caldo de carne y buñuelos. De segundo, cordero trufado. La trufa, la perla negra de la montaña. De postre, los típicos Flaons, dulces hechos con requesón y almendras.

Paseo después de una buena comilona. Sus calles invadidas de pequeños comercios invitan a callejear. Durante el paseo se observan casas muy antiguas pero a la vez muy cuidadas. Presidiendo el pueblo, un sólido castillo testigo de múltiples batallas, y muy pocas veces conquistado dada su especial ubicación. Durante el día Morella ocupa un marco impresionante pero, por la noche (debajo), y gracias a una cuidada iluminación, la población se convierte en un auténtico espectáculo.

El segundo día de nuestro viaje se centrará en la realización de actividades de aventura. Cambio de Comunidad pero no de tercio. El parque natural de Els Ports se extiende una parte hacia Cataluña. En la zona catalana, nuestra asociación posee dos casas de turismo rural. Una en Paüls y otra en Caseres. El dueño de la Posada de Caseres es monitor de aventura y le confiamos a él , con plena confianza, nuestra andanza  . Además también podemos contactar con Esgambi, expertos en realizar deportes de aventura en la zona.

Provisiones.: Agua (cogida de camino de la Fuente de la Virgen de Peñarroya de Tastavins en Matarraña), un poco de fruta, sándwiches y un buen guía. Todo ello necesario para aventurarse a conocer profundamente el territorio haciendo barranquismo, bicicleta y senderismo por una de las rutas más famosas, Els Estrets.

Tengo que decir que la zona de Els Ports es una maravilla de la naturaleza. Volviendo a la realidad de la vida cotidiana, uno se pregunta porque esta zona tan increíble no es más conocida. Quizás está mejor así, alejada de las masas y visitada tan solo por gente que desee fusionarse con la naturaleza.

Alejandro Saporta  
@alexsaporta  
@cra_
facebook.com/casasruralesamigas